China ya tiene la Armada más grande del mundo y 232 veces más producción naval que EEUU

China continúa aumentando el ritmo de fabricación con el objetivo de convertirse en la marina de guerra más poderosa del planeta y plantar cara al dominio de Estados Unidos

Foto: El Fujian en el astillero, el tercer portaaviones chino. (CCTV)
El Fujian en el astillero, el tercer portaaviones chino. (CCTV)

China ha superado a Estados Unidos en número de buques de guerra, y su capacidad de producción naval es ya 232 veces mayor. El dato —revelado en un informe filtrado de la Marina estadounidense y la Oficina de Inteligencia Naval (ONI)— no deja lugar a dudas, a pesar de que el tonelaje chino todavía está algo por debajo del estadounidense y muchos de sus barcos tienen también funciones civiles.

 

Pero según los expertos militares, el dramático crecimiento de la Armada china es innegable. Según el informe filtrado, los astilleros chinos pueden producir aproximadamente 23.250.000 toneladas, mientras que los estadounidenses apenas alcanzan las 100.000 toneladas. Esta enorme capacidad le ha permitido a China construir una flota más grande y moderna, algo impensable hace apenas dos décadas.

Foto:  (EFE/Germán Doblas)

Poder en todos los océanos

El número de buques chinos ya superó al de Estados Unidos en 2020, con 350 barcos frente a los 296 de la Marina estadounidense. Pero este crecimiento no ha parado y las previsiones son alarmantes para Washington. El informe afirma que, para 2035, China habrá acumulado 475 navíos de guerra, incluyendo nuevos portaaviones de tipo 4, con motores nucleares. En esa fecha, Estados Unidos puede tener entre 305 y 317, según las proyecciones de la ONI.

 

El presidente chino Xi Jinping ha dejado claro que uno de los objetivos centrales de su política exterior es garantizar su supremacía en el Pacífico, pero la magnitud de su expansión naval apunta a tener el mismo dominio en todos los océanos del planeta.

 

 

placeholderEl nuevo portaaviones americano de la clase Ford (US Navy)
El nuevo portaaviones americano de la clase Ford (US Navy)

 

 

El crecimiento no es solo cuantitativo, sino también cualitativo: la Armada china ha incorporado submarinos nucleares equipados con misiles balísticos intercontinentales, destructores con armas de energía dirigida y, dentro de unos años, añadirá portaaviones de propulsión nuclear y nuevos portaaviones centrados en el despliegue de enjambres de drones. El tercer portaaviones chino, botado en 2022, está considerado por los analistas como el portaaviones más avanzado del mundo fuera de la US Navy.

Tras la estela norteamericana

China se está preparando para un posible conflicto en el escenario de Taiwán. La Marina china ha simulado ataques a buques estadounidenses en altamar y amarrados en un puerto simulado en el desierto de Taklamakán. Las imágenes por satélite, analizadas por el experto militar H I Sutton, confirman el uso de misiles balísticos hipersónicos en estas pruebas. Según Sutton, "estos misiles balísticos hipersónicos antibuques son una amenaza cada vez más significativa para los buques de guerra estadounidenses". Lo más preocupante, según el analista, es que estos misiles parecen tener la capacidad de distinguir objetivos en el puerto y destruirlos con una precisión letal.

placeholderEl superacorazado USS Arizona se hunde en el puerto de Pearl Harbor tras el ataque japonés del 7 de diciembre de 1941. Los analistas americanos temen un ataque similar chino con misiles hipersónicos antinavío
El superacorazado USS Arizona se hunde en el puerto de Pearl Harbor tras el ataque japonés del 7 de diciembre de 1941. Los analistas americanos temen un ataque similar chino con misiles hipersónicos antinavío

 

 

Estos ensayos recuerdan inevitablemente a ataques contra instalaciones navales como las de Pearl Harbor, que iniciaron la participación de EEUU en la Segunda Guerra Mundial. La diferencia ahora es obvia: los misiles hipersónicos DF-21D y DF-26 que China ha desplegado son mucho más avanzados que cualquier arma utilizada en 1941 y pueden alcanzar barcos sin capacidad de respuesta posible.

 

"Los nuevos misiles hipersónicos podrían distinguir los buques de manera correcta para decapitar a la flota antes de que pueda escapar", apunta Sutton. Estas pruebas incluyen misiles lanzados desde tierra y bombarderos. Según el experto naval Damien Symons, "el diseño de los objetivos [en las pruebas] es muy calculado. Las orientaciones, formas y tamaños son coherentes en varios objetivos". Demuestran una capacidad ofensiva que no puede ser ignorada por Washington.

Crisis industrial

Mientras tanto, Estados Unidos se enfrenta a un problema estructural inevitable: su industria naval, que fue la más grande del mundo durante la Segunda Guerra Mundial, ha sufrido una continua decadencia. La falta de negocio y subsidios estatales han cerrado astilleros por todo el país. Un informe del Eno Center for Transportation señala que las compañías han sacado una gran capacidad de producción al extranjero y, entre 1987 y 1992, Estados Unidos vendió solo ocho barcos comerciales de más de 1.000 toneladas brutas, mientras que en 1975 esa cifra alcanzaba 77 por año. El analista naval James Holmes lo resume así: "América ha cedido no solo su capacidad de construir más barcos, sino también de repararlos y mantener su flota".

placeholderExpansión de los astilleros de Jiangnan (H I Sutton)
Expansión de los astilleros de Jiangnan (H I Sutton)

 

 

A pesar de algunos esfuerzos recientes por modernizar sus astilleros y externalizar ciertos trabajos a astilleros comerciales, la brecha con China sigue ampliándose. Las instalaciones de Jiangnan, donde se construyen los portaaviones chinos, han aumentado su capacidad en un 50% en los últimos años. Además, China ha establecido nuevas bases para la construcción de submarinos nucleares cerca de Wuhan, y ha ampliado el puerto de Huludao, donde se ensamblan estas embarcaciones.

 

Además, el gobierno chino no solo está construyendo más buques, sino que, aparte de la tecnología que copia de los EEUU, está desarrollando sus propias armas avanzadas como cañones electromagnéticos y láseres de alta potencia. Según Symons, "estos nuevos desarrollos podrían hacer obsoletos a los portaaviones tal y como los conocemos". China ha logrado lanzar proyectiles de 124 kilogramos con un cañón electromagnético, lo que representa un salto tecnológico significativo que podría cambiar las reglas del juego naval si alguna vez son desplegados.

 

La Armada estadounidense, que fue una vez la fuerza indiscutible en los océanos, se enfrenta a un rival cuyo crecimiento parece imparable mientras las tensiones en el Pacífico van en aumento, y Pekín sigue desarrollando su capacidad naval con una rapidez y eficiencia que Estados Unidos no puede igualar en el corto plazo.