Imagina el caos en plena playa de Magaluf cuando un yate, el famoso ‘La vida loca’, se hundió justo delante de los ojos atónitos de turistas y locales. Este lujoso barco, que costaba 11.800 euros a la semana para alquilar, se convirtió en el centro de atención tras sufrir una vía de agua que lo llevó al fondo del mar.
Era un día cualquiera, pero el destino tenía otros planes. Cuatro personas estaban a bordo cuando la embarcación comenzó a irse a pique. Afortunadamente, los socorristas no tardaron en actuar. Miguel Lazareno, supervisor de la playa, fue testigo del momento en que el yate desaparecía y no dudó ni un instante en llamar al equipo de rescate del Ajuntament