El Principado y la Autoridad Portuaria de Gijón acordaron ayer abordar un análisis global de la calidad de las aguas en El Musel con el objetivo, entre otros aspectos, de determinar en qué forma influyen en las aportaciones de carbón que de forma recurrente llegan a la playa de San Lorenzo y que, según los informes encargados por el Ayuntamiento, tienen su origen en el Puerto y no en los restos del naufragio del “Castillo de Salas”. La decisión de llevar a cabo este estudio fue adoptada en la reunión que mantuvieron ayer el director general de Cambio Climático y Calidad Ambiental del Principado, Pablo Álvarez Cabrero, y la directora general del Agua, Vanesa Mateo, con el director del Puerto de Gijón, José Manuel del Arco, en la sede de la Autoridad Portuaria.

La reunión también sirvió para realizar un seguimiento del plan de calidad del aire de la zona oeste de la ciudad y para abordar las medidas que va a poner en marcha el Puerto desde el punto de vista medioambiental, entre ellas, los apantallamientos y un plan de movilidad interior. Los responsables de la administración autonómica y el director de El Musel se mostraron de acuerdo en que la reunión de la comisión de coordinación del plan de calidad del aire, de la que forman parte el Ayuntamiento, el Puerto y el Principado, se celebre a finales de este mes o principios del siguiente.

 

En cuanto a la parte de aguas, además de la decisión de llevar a cabo el citado análisis global de la calidad en El Musel, la reunión sirvió como una primera toma de contacto entre las autoridades portuarias y la nueva directora general del ramo.

Inversiones

El repaso a los proyectos medioambientales que está poniendo en marcha El Musel también ocupó parte del encuentro. Tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, el plan de inversiones para el periodo 2021-2025 del Puerto recoge actuaciones por un montante total de 60,34 millones de euros, de los que 20,73 millones corresponden a planes relacionados con la sostenibilidad y la eficiencia energética. Por tanto, casi 35 de cada cien euros que gastará El Musel durante los próximos cinco años se destinarán a mejoras de tipo medioambiental. La Autoridad Portuaria empleará diez millones en potenciar la accesibilidad ferroviaria, 12,6 en obras genéricas y de mantenimiento, 11,6 millones en labores de digitalización e innovación, 2,17 millones en seguridad y protección, y 3,14 millones en la construcción de un nuevo centro de inspección fronteriza de control de mercancías.