Se hunde en Bermeo otro pesquero español con tripulación mínima

 

El pesquero “ASTELEHENA”, con casco de madera y  de 13,65 m de eslora, tripulado por dos personas, se ha hundido sobre las 08-15 del día 27 de marzo de 2014, cuando se dedicaba a la pesca de la caballa (verdel) cerca de la isla de Ízaro, en la costa de Vizcaya.

 

 

       

                                          Puerto de Bermeo (Vizcaya ) y la Isla de Ízaro

La tripulación del pesquero, de acuerdo con la normativa sobre tripulaciones de los buques de pesca, recientemente aprobada, estaba formada exclusivamente por el patrón (54 años) y por  otra persona de 55 años. Ambos pudieron ser rescatados poco antes de que se hundiese el barco en cuestión.

                                   

                       

El pesquero de nombre “ASTELEHENA”, tenía las siguientes características:

Matrícula BI-2-3-95.

Eslora total 13,65 m.

Motor: 125 CV.

Fue construido en el año 1995, por lo que tenía 19años de antigüedad.

Arqueo GT:  13,92

Arqueo TRB: 11,44

Tenía su puerto base en Bermeo, y se dedicaba a la pesca con artes menores en el Cantábrico NW.

Se desconocen las causas reales del hundimiento, aunque en principio se achacan a la colisión de la proa con un objeto flotante, un “container”, se dice. Pero la forma en la que se ha hundido el barco, con la proa hacia arriba, nos hace dudar que la vía de agua se localizase en la proa, por lo que podrían ser otras las causas reales del hundimiento. Será la Comisión Investigadora de Accidentes Marítimos la que tendrá que dictaminar una vez realizadas las investigaciones pertinentes.

Al lugar del accidente acudieron varias embarcaciones que faenaban por la zona y también una patrullera de la Guardia Civil, que intentó remolcar al buque al puerto de Bermeo, pero este se hundió a unos 200 m. de la bocana.

Las alarmas se ha encendido.

 

Desde la aplicación de la nueva normativa sobre tripulaciones de los buques pesqueros españoles se han producido varios accidentes graves en este tipo de buques, cuya tripulación se ha reducido hasta tales límites que es imposible cumplir las prescripciones del Reglamento Internacional para Prevenir los Abordajes en la Mar (RIPA,1972). En un pesquero de 14 m de eslora, con dos personas de tripulación, es prácticamente imposible estar faenando (preparando, largando, recogiendo nasas, etc.) y simultáneamente ejercer la debida vigilancia y control en la mar.

Esta Asociación ya se manifestó en contra de dichas medidas antes de su aprobación.

Las autoridades competentes en la materia deberían tomar buena nota de los que está ocurriendo y actuar en consecuencia.

Es cierto que cada vez hay menos pesca, que los precios del pescado se mantienen en niveles bajos, etc. pero eso no justifica que se consientan prácticas que lindan o rebasan la temeridad.