EL MUSEL SE RETRASA.- CAJÓN A CAJÓN

EL MUSEL SE RETRASA.-  CAJÓN A CAJÓN

  JAVIER MORÁN    

Con mano maestra, los operarios de la ampliación de El Musel fondearon este domingo el segundo inmenso cajón de los 78 que armarán el dique norte del superpuerto. Sin embargo, la cadencia de colocación de los inmensos bloques -éste, diez días después del primero- indica que la obra muselística podría rebasar ampliamente la fecha de finalización, prevista para diciembre de 2008.   Pero, yendo a la referida maniobra del domingo, hay que admirarse con la pericia ingenieril de depositar con precisión ese monstruo de 22.000 toneladas, que mide cincuenta metros de largo, treinta y pico de ancho, y otros tantos de profundidad, equivalentes a un edificio de diez plantas. Para hacerse una idea sólo aproximada, es como tomar una construcción aun mayor que el cuerpo principal del Hospital de Cabueñes, conducirlo mansamente por la mar cantábrica, y colocarlo a tan sólo veinte y pico centímetros del bloque anterior, es decir, tan cerca que entre ellos casi no cabría el cráneo de un niño cabezón. Impresionante.   Hasta aquí, el éxito y la admiración. A continuación, la preocupación por el calendario de la obra. La referida cadencia de colocación de los cajones supone que se podrán fondear unos veinte al año, lo que ocupará alrededor de doscientos días -casi siete meses- de bonanza climática, una circunstancia que nos tememos al borde de lo que el Cantábrico suele permitir.  

Con veinte cajones por año, viento en popa y a toda vela, colocar el total de 78 llevará cuatro años, lo que nos pone en 2010. Pero, para entonces, aún faltarían obras como el relleno de los muelles o el remate de escolleras.   ¿Para cuándo tendremos entonces un superpuerto operativo? A saber. Conste que no es caprichosa la prisa. Más allá de 2008 no fluirán fondos europeos, fundamentales para que El Musel no quiebre con las obras, que, además, tienen ya muy rebasado el presupuesto. Pero pasan los meses y el Principado de Areces no se digna a explicar las desviaciones ni el modo de paliar sus nefastas consecuencias.    

LA EMPRESA DE LA AMPLIACIÓN DE EL MUSEL COLOCARÁ HOY EL PRIMER CAJÓN DEL NUEVO DIQUE

-El Comercio  

E. C./GIJÓN  

AL MAR.

Botadura del primer cajón en el mes de febrero. / SEVILLA   La unión temporal de empresas Dique Torres tiene previsto colocar esta mañana el primero de los cajones que conformarán el dique Norte de la ampliación del puerto de El Musel. Se trata de una pieza de hormigón que tiene 32,25 metros de alto, 49,95 de largo y 32,01 de ancho. Irá ubicada sobre una "cama" preparada con más de tres metros de escollera en el fondo marino a una profundidad de 24,75 metros, por lo que sobresaldrá del agua 7,5 metros. Estos cajones se verán coronados con un espaldón de quince metros de altura.   Para que el cajón quede perfectamente fondeado, será rellenado con 40.704,28 metros cúbicos de arena, con lo que las 21.791 toneladas de peso del cajón en vacío pasarán a 95.059, cuando se llene de arena.   El fondeo   La previsión es que antes de las diez de la mañana un remolcador lleve el cajón hasta la zona de fondeo para, a las diez y media, comenzar la operación de fondeo. Esta comenzará con el lastrado del cajón con agua para, una vez ubicado en el lugar exacto, llenarlo de arena.   Estas estructuras, de las que se habrá de construir 78, se están fabricando en el contradique muelle de Marcelino León y los cajones se acopian al abrigo de dicho contradique y el Príncipe de Asturias. La empresa tarda unos diez días en construir cada uno de estos cajones, a razón de 20 centímetros a la hora.   El buque cajonero "Tarifa Primero", que construye estas estructuras, llegó a El Musel el pasado 17 de setiembre, procedente de Algeciras. En concreto, construirá cajones suficientes para formar 1.530 metros del dique Norte y otros 1.200 del muelle Norte.