Rubén González Rodríguez. Director de la Escuela Superior de la Marina Civil.

«El próximo curso incorporaremos una titulación sobre nuevos combustibles»

RUBÉN GONZÁLEZ RODRÍGUEZ. DIRECTOR DE LA ESCUELA SUPERIOR DE MARINA CIVIL

Rubén González Rodríguez, frente a la Escuela de Marina Civil, de la que es director. / ARNALDO GARCÍA

EUGENIA GARCÍA

GIJÓN. Martes, 30 marzo 2021, 03:05

 

Rubén González (Langreo, 1974) gobierna desde hace cuatro años la nave que es la Escuela Superior de la Marina Civil, donde estudian, entre grado y máster, cerca de 300 alumnos.

-El proyecto de Gijón Azul, auspiciado por Impulsa, bebe del concepto de campus del mar, que nació de la colaboración entre el Centro de Formación Profesional del Mar, el Centro Jovellanos y Marina Civil.

-Es algo que pedimos hace tiempo y por lo que venimos peleando a título individual. En Gijón, pese a que vive de espaldas al mar, se dan las condiciones óptimas para desarrollar y explotar la economía azul. No creo que haya en el mundo otra ciudad donde se conjuguen tres centros excelentes, de referencia, que cubran todo el espectro de la formación marítima. Decidimos colaborar más y trascendió. Ahora tenemos que vincularnos al entorno profesional e institucional.

-¿Qué puede aportar la Escuela de Marina a este ecosistema?

-Por una parte, una formación de calidad y, por supuesto, aportar al sector nuestros titulados, que son muy valorados. Y por otro lado, la investigación: colaborar en la I+D+i de ese ecosistema bien por iniciativa propia o de la mano de alguna empresa u organismo que tenga alguna idea.

-Hablemos de formación.

-Es nuestra razón de ser. Cubrimos la formación superior con los títulos conducentes a los de oficial y jefe de máquinas de la marina mercante y de pilotos y capitanes de la marina mercante. La inserción laboral de nuestros egresados es amplísima, cada vez se abren más nichos de trabajo. Somos un centro con gran tradición y trabajamos en ampliar nuestro catálogo.

-¿Qué plantean?

-Queremos desarrollar formación continua de especialidad que permita reciclar a nuestros egresados, sobre todo en cuanto a aplicaciones de nuevas tecnologías, desarrollo de combustibles y los retos que vienen: digitalización, industria 4.0, eficiencia energética y sostenibilidad.

-¿Cuándo incorporarán alguna titulación nueva?

-Nuestro plan es tener, al menos, una titulación relacionada con los nuevos combustibles en marcha el curso que viene, aunque por la pandemia todo va más despacio.

-La falta de relevo docente es uno de los problemas más acuciantes de la escuela...

-El problema trasciende nuestras capacidades e incluso al equipo rectoral. Estamos sujetos a un convenio internacional y a la dirección de la Marina Mercante, que exige que los profesores tengan experiencia laboral en el sector y que, además, cumplan las exigencias de cualquier carrera docente. Para que quien está navegando quiera dejarlo por el ámbito académico tenemos que ofrecer algo atractivo. Pedimos una figura particular que permita incorporar a la gente de forma transitoria.

Avances tecnológicos

-Mantenerse al día en avances tecnológicos es otra prioridad.

-Como en cualquier otra enseñanza técnica, mantenernos a la vanguardia para dar una enseñanza de calidad ajustada a la realidad de la profesión requiere inversiones. Otra necesidad en la que la iniciativa de Gijón Azul nos puede ayudar mucho es la divulgación de los estudios.

-¿No se conocen?

-Son vocacionales, no nos engañemos, pero aunque tienen muy buena salida profesional siguen siendo desconocidos.

-Véndase al futuro estudiante.

-Somos un centro pequeño, lo que nos da una ventaja formativa importante por la cercanía y el trato personal, que ayudan a que nuestros egresados sean reconocidos. Tenemos muy buena inserción laboral y el entorno laboral emergente puede ampliar aún más las posibilidades de nuestros egresados, que aún cuando salen de la región para ejercer su profesión aportan riqueza, porque a menudo mantienen aquí su residencia.

Quince departamentos

-En cuanto a la investigación, ¿qué puede aportar a la economía azul?

-Tenemos mucho que aportar. Nuestros profesores vienen de quince departamentos distintos. Del derecho, la empresa y de todas las ramas de la ingeniería: química, electricidad... Eso suma capacidad investigadora en muchos ámbitos.

-¿Qué líneas de investigación trabajan que tengan aplicación en las empresas del sector?

-Tenemos proyectos relacionados con el medio ambiente y la sostenibilidad, como el Blue Ports, en el que también participan profesores de Biología y que estudia las especies invasoras en aguas de lastre. También estudiamos combustibles y lubricantes más amigables con el medio ambiente.

-¿En qué consiste el proyecto?

-Tratamos de desarrollar lubricantes biodegradables, de formulación verde. En lugar de utilizar petróleo o recursos fósiles, partimos de fuentes naturales o minerales. Intentamos cambiar los aditivos tradicionales por otros formulados a base de líquidos iónicos, que son unas sales que se desarrollan a partir de ácidos de cualquier grasa natural o mineral. Estamos ya en fase de buscar a alguien que quiera comercializar el producto.

-¿En qué más trabajan?

-Tenemos colaboraciones interesantes con gente de ingeniería automática y electrónica para el desarrollo de sistemas de ayuda a la navegación orientados hacia la automatización, que cada vez será mayor en los buques. Se trata de monitorizar cada vez más parámetros y permitir el intercambio de información para facilitar la toma de decisiones.

-¿Hay tejido empresarial ligado a la economía azul suficiente como para generar esos lazos?

-Quizás les pase como a nosotros, somos todos relativamente desconocidos. Somos muchos agentes haciendo cosas interesantes, de alto valor añadido, pero quizá no nos conozcamos lo suficiente como para encontrar esas sinergias. Una vez se establezca esta red, la economía azul podría ser un tractor económico importante para la ciudad.

 

COMENTARIOS DE AEMC

La Asociación Española de la Marina Civil desea expresar su perplejidad y decepción ante las declaraciones del actual Director de la Escuela y lamenta profundamente que el rumbo expuesto por el actual director pueda ser el que marque el futuro las Enseñanzas Superiores de la Marina Civil en Gijón. 

Sería muy triste que el futuro de la Marina Civil en Gijón estuviese lastrado por planteamientos retrógrados y carentes de proyección profesional. No es eso lo que demanda la Marina Civil.

El deterioro actual de la Marina Civil Española no se enmienda ni con florituras coloristas ni eludiendo la necesidad de ampliar el abanico de titulaciones profesionales que se demanda en el sector marítimo a nivel internacional. Una simple mirada a la oferta curricular de las Escuelas y Facultades Náuticas de países  como EEUU, Japón, Noruega, Alemania, etc. será suficiente para comprender el porqué de nuestro rechazo a la propuesta del director de la Escuela.

La finalidad de una Escuela Superior de la Marina Civil no es la de formar exclusivamente conductores de barcos mercantes. Esa conceptualización simplista es aberrante. 

La Escuela de Marina Civil no debe estar sometida al dictado de mentalidades estrechas incapaces de dar respuesta a las demandas de la sociedad en la que viven y en la que han de vivir quienes ahora se están formando como futuros profesionales. 

Los Estudios de Náutica no pueden estar lastrados e hipotecados por las ambiciones de otras profesiones ni por los sueños oníricos de trasnochados caciques políticos que llevan años deteriorando las Enseñanzas Náuticas.